02 agosto 2011

afecto positivo

"Ganar un millón de dólares en un año, pero nada en los nueve años anteriores, no produce el mismo placer que tener el total distribuido en partes iguales a lo largo del mismo periodo, es decir, cien mil dólares al año durante diez años consecutivos. Lo mismo cabe decir del orden inverso: forrarse el primer año, y no obtener nada en lo que queda de ese periodo. En cierto modo, nuestro sistema de placer se saturaría muy deprisa, y no conllevaría el equilibrio hedonista como la hace una devolución en la declaración de la renta. De hecho, nuestra felicidad depende mucho más del número de casos de sentimientos positivos, es decir, de lo que los psicólogos llaman "afecto positivo", que de su intensidad. En otras palabras, una buena noticia es, ante todo, una buena noticia; cuán buena sea importa relativamente poco. De modo que para tener una vida placentera deberíamos extender esos pequeños "afectos" a lo largo del tiempo de la forma más uniforme posible. Tener muchas noticias medianamente buenas es preferible a una única noticias fantástica".


Nassim Nicholas Taleb, El Cisne Negro, Ed. Paidós, Barcelona, 2011, p. 150

Que al final del verano, todos podamos decir que hemos disfrutado de mucho de esos pequeños "sentimientos positivos".

3 comentarios:

Walden dijo...

Lo bueno es que podemos fabricarnos esos pequeños placeres diariamente, sin tener que esperar la devolución de hacienda.
Un buen libro, por otra parte.

El final del verano coincide con el comienzo de la temporada de setas, esos arbolitos de gnomos que logran sacarte a pasear al campo durante horas.

Que distribuyas adecuadamente la felicidad.
Un saludo.

Eugenia Cristina dijo...

Buscar las pequeñas alegrías incluso en situaciones ingratas en aspectos fundamentales, alejándonos de esa parte. Así podemos seguir adelante, disfrutando esos detalles, con la gracia de Dios.

Un cordial saludo.

ahhh dijo...

Walden: Me encantan las setas, así que cuando se acabe el verano y las vacaciones, nos esperan muchos pequeños momentos de felicidad (y si por casualidad nos topamos con algún gnomo, pues mejor aún, je,je)
Muchas gracias.

Eugenia: Buscar el lado bueno, por pequeño que sea, a todo, es una buena estrategia, con o sin la gracia de dios (por mi parte, mejor sin. Prefiero no dejar mi felicidad en manos de algo que no sé ni lo que es).
Muchas gracias por tus palabras.